Choi Sung-Bong

En México muchas veces ofrecemos mil razones por las que no salimos adelante: falta de recursos, pobreza, etc. Ahora el narcotráfico también es una excusa. Escuchamos decir que porque los jóvenes no tenemos otras oportunidades muchos deciden unirse a las filas del crimen organizado o se convierten en corruptos. Que vergüenza!

Choi Sung-Bong, este chico coreano que participo en la versión Coreana de la Academia, es un ejemplo que debe servir para que cada uno (niño, joven, adulto). Después de quedar huérfano a los 5 años de edad y de huir de un orfanato donde era maltratado, vivió por más de 16 años en la calle durmiendo a las afueras de bibliotecas y otros sitios públicos. Sobrevivió sin la ayuda de nadie con la venta de chicles y bebidas energéticas. Una noche tuvo la fortuna de escuchar a un tenor en alguno de los bares donde vendía sus golosinas. La experiencia lo impacto tanto que comenzó a practicar el canto por sus propios medios. Sin otra formación profesional que la de unas cuantas lecciones las cuales eran todo lo que su reducido ingreso le permitía pero con su gran motivación es como pudo alcanzar el nivel profesional que escuchamos en este vídeo. 
Dejemos de jugar a que la vida es difícil y que solo la fortuna o la cuna donde nacimos definen nuestro futuro. En realidad la fortuna nos ha sido dada a través de la vida y también el talento necesario para salir airosos de cualquier circunstancia.

Somos acaso nosotros mismos quienes debemos reconocer esa fortuna?, encontrar ese talento?, dejarnos conmover por ideales nobles?

Gracias a Dios por permitir que haya espíritus capaces de soñar, anhelar, aspirar y trabajar aun cuando por sus circunstancias podrían tener mil razones para no hacerlo.

Y también a Dios le pido que quienes conocemos historias como esta no solo nos admiremos, conmovamos o lloremos, sino que trabajemos con todas nuestras fuerzas para emplear sabiamente las oportunidades que se nos han dado. Y que seamos puentes en vez de baches para otros, especialmente para aquellos que luchan en peores circunstancias que la nuestra.